El Sol Neighborhood Educational Center

El Sol Neighborhood Educational Center (El Sol) fue fundado en 1991 como una organización comunitaria sin fines de lucro con la misión de atender las necesidades educativas de personas de bajos ingresos que no hablan inglés. La organización sirve a la región de Inland Empire en el sur de California, que incluye los condados de Riverside y San Bernardino. La región está ubicada en el “Tercer California”, un término utilizado por el Instituto Brookings para describir las disparidades en los indicadores económicos, así como en los resultados de salud y sociales entre subregiones del estado. La población objetivo de El Sol es 61.7% hispana/latina, 19.2% blanca, 12.4% afroamericana y 4.8%. asiática/isleños del Pacífico. En muchos barrios a los cuales El Sol presta servicios, más de la mitad de los residentes que viven en o por debajo del 200% del nivel federal de pobreza. Además, el 85% de los niños del Distrito Escolar Unificado de la Ciudad de San Bernardino reciben comidas gratis o a precio reducido (en comparación con el 55.9% en California), prueba de que un número desproporcionado de niños viven por debajo del nivel de pobreza. Además, San Bernardino ocupa el lugar 55 de los 56 condados de California en términos de mala calidad del entorno construido, un indicador que incluye el acceso a alimentos saludables, la calidad del medio ambiente y la densidad de tiendas de licores. Además, en San Bernardino, casi 1 de cada 4 adultos (24 por ciento) informan tener apoyo social y emocional insuficiente, en comparación con el promedio nacional de 14 por ciento. Esto puede explicar por qué las personas en San Bernardino tienen 4.1 “días de mala salud mental” (en los últimos 30 días), en comparación con la referencia nacional de 2.3 días. A pesar de las necesidades confirmadas, San Bernardino recibe un promedio de $6 por cada habitante en financiamiento de asentamiento comparado con $678 en San Francisco o $108 en el cercano Los Ángeles. Este contexto confirma las necesidades apremiantes únicas de esta comunidad y la urgencia de aplicar un modelo de empoderamiento sólido, amplio y culturalmente sensible de la comunidad tal como Promotores de Salud. Un activo importante de la comunidad es el Programa de Promotores de Salud (PSP), aplicado como resultado de la creciente necesidad de una educación y divulgación comunitarias sobre diversos temas de salud.

En 2015, El Sol se asoció con la Universidad de Loma Linda y desarrolló una innovadora Academia Promotores de Salud. La academia ofrece capacitación estructurada de un mínimo de 70 horas para habilitar a líderes de la comunidad para servir como Promotores de Salud. El Sol tiene asociaciones en curso con una amplia variedad de partes interesadas de la comunidad. Por ejemplo, el trabajo de El Sol ha incluido la colaboración con fundaciones privadas, como la Fundación Weingart, la Fundación de Mujeres de California, la Fundación AstraZeneca y la Fundación Archstone, entre otras. El Sol también colabora con instituciones públicas y organismos gubernamentales, como el Departamento de Salud del Comportamiento del condado de Riverside y San Bernardino, los Departamentos de Salud Pública del condado de Riverside y San Bernardino, y el Departamento de Servicios para Personas Mayores y Adultos del condado de San Bernardino. Para garantizar el seguimiento y la evaluación de los programas, El Sol se asocia con la Universidad de Loma Linda. El público destinatario de la Academia Promotores de Salud son líderes comunitarios con pasión demostrada por la salud y el empoderamiento de la comunidad. Con la Academia Promotores de Salud, los participantes completan un mínimo de 70 horas de capacitación básica en temas como la comunicación efectiva, métodos de aprendizaje para adultos e informal, asesoramiento del cliente, visitas del hogar y de la familia, resolución de conflictos, práctica ética y defensa comunitaria, entre otros temas. Además, los promotores reciben capacitación acerca de las necesidades de los niños, salud mental, beneficios de los juegos en el desarrollo, dinámica familiar, apego, crianza de los hijos, la variedad de estilos cognitivos mostrada por los padres, y diferencias culturales.

Como una organización de aprendizaje, El Sol está continuamente evaluando su programa. El Sol ha tenido un éxito significativo. Por ejemplo, en 2014-2015, El Sol también pudo documentar el impacto en más de 130,000 participantes, a través de una variedad de estrategias de empoderamiento de la comunidad. Además, en uno de sus proyectos innovadores diseñado para educar a 600 personas en temas de nutrición y prevención de la obesidad, una prueba previa-posterior de los participantes (n=275) reveló que los participantes mostraron aumentos significativos (p<0.05) en 13 de los 18 elementos de conocimientos. Además, los resultados de la encuesta indican que los participantes aumentaron significativamente su intención de hacer cambios en el comportamiento de salud en todas las áreas siguientes: beber menos bebidas azucaradas, comer más frutas y verduras, ser más activos físicamente, invitar a la familia a hacer ejercicio juntos, hablar con la familia sobre alimentos saludables, cocinar con menos grasa, beber más agua, utilizar una lista de comestibles, y servir porciones más pequeñas de alimentos con alto contenido de grasa y azúcar. Al comparar los resultados de antes y después de la encuesta, los participantes reportaron un aumento en su capacidad de hacer más ejercicio; reducir las bebidas azucaradas, comer más frutas y verduras y preparar bocadillos saludables para sus hijos. Estos hallazgos son importantes, ya que confirman la eficacia del modelo de promotores de salud para influir en las actitudes y comportamientos. El éxito de los programas adicionales se encuentra en las áreas de la prevención y la intervención temprana, administración estructurada de casos, desarrollo de la primera infancia y alfabetización, educación de los padres y visitas domiciliarias sobre la salud madre-infante. Hay 2 lecciones clave:

• Lección 1: Confíe en la comunidad para desarrollar los programas. El Sol se esfuerza por incluir la voz de las comunidades en el desarrollo de programas y servicios. Esto puede ser a través de encuestas de clientes o a través de comités asesores de los programas. A veces, uno puede verse tentado a desarrollar un programa sin consulta previa con la comunidad. Esto puede ser el resultado de una oferta de financiamiento u otra necesidad percibida. Sin embargo, antes de continuar, es importante disponer de un mecanismo para hacer partícipes a las voces de la comunidad.
• Lección 2: La capacitación de promotores es mucho más que un certificado académico. A través de la Academia de Promotores, El Sol proporciona un mecanismo estructurado para que los líderes de la comunidad continúen desarrollando competencias asociadas con ser un promotor de salud eficaz. Sin embargo, la culminación de una serie de clases o pruebas no deben ser la norma para certificar promotores de salud. En su lugar, la experiencia de campo, como un periodo de práctica supervisado, puede ser más adecuada para identificar a las personas que están dispuestas a servir como facilitadores de la comunidad. La función de los promotores requiere de empatía, confianza y compromiso con el empoderamiento de la comunidad mediante la concientización.